Todas nosotras tenemos piel de naranja, algunas más que otras, ninguna excluida. No es algo que afecte la maravillosidad de cada mujer... ¡todas somos hermosas de manera única! Sin embargo, a veces esa piel no lisa no nos hace sentir en nuestra mejor forma, en ese caso, lo que podemos hacer por nosotras mismas es seguir algunas reglas simples para un estilo de vida saludable y mimarnos con productos adecuados, ¡para sentirnos realmente en forma y más ligeras! Aquí tienes los 10 remedios para combatir la celulitis y hacerle la vida realmente imposible.

¡Somos lo que comemos!

¡Nunca hay nada más cierto! Si queremos deshacernos de la antiestética piel de naranja y sentirnos más ligeras, primero debemos seguir una alimentación saludable.

Saludable no significa en absoluto aburrido, ¡todo lo contrario! Significa comer alimentos genuinos que nos brinda la naturaleza, llenar nuestros ojos de magníficos colores y nuestra boca de una explosión de sabores, sin artificios. Abandonemos los alimentos artificiales y procesados, prefiriendo frutas, verduras y proteínas vegetales, que ayudan a nuestro hígado, mejoran la funcionalidad de nuestro intestino y nos purifican, haciéndonos lucir más hermosas y sonrientes.

No olvidemos que nuestro cuerpo está compuesto en su mayoría por agua, nuestro objetivo debe ser preservarla en las células e introducir constantemente nueva agua para compensar la que perdemos fisiológicamente. Por eso, para combatir la celulitis, es importante beber al menos 6/7 vasos de agua al día y reducir al máximo posible el consumo de sal añadida, lo que necesitamos ya está contenido en lo que comemos.

Si pudiéramos eliminarlo por completo, descubriríamos que los alimentos tienen un magnífico sabor natural y podríamos despedirnos de la retención de líquidos.

¡Activémonos!

"Estoy cansada, no tengo tiempo, hace frío, hace calor, se murió mi gato..." son solo algunas de las excusas que la ferviente imaginación de cada mujer puede encontrar como justificación para preferir estar tumbadas en el sofá en lugar de activarse y hacer un poco de ejercicio, correr, caminar, estirarse, bailar o cualquier otra actividad que implique movimiento.

Debemos comprometernos y hacer ejercicio físico de forma constante, no solo para mejorar el aspecto de nuestra celulitis, sino también para mantener nuestro cuerpo sano y ágil.

No se necesitan equipos ni gimnasios, la mejor manera de fortalecer los músculos, estar más tonificada y flexible es hacer un poco de entrenamiento con el propio peso corporal, esto también nos permitirá mejorar la postura y la forma de caminar.

Cuidemos nuestra microcirculación

Podemos hacerlo a través de la actividad física, pero también a través de algunos pequeños cuidados que a menudo pasamos por alto:

• ¡Evitemos cruzar las piernas! Es un gesto coqueto que a nosotras las mujeres nos encanta, pero a nuestra pobre circulación no le gusta tanto, ya que esta posición comprime los vasos sanguíneos y dificulta la circulación. Así que podemos seguir haciendo uno de los gestos que más nos gusta, siempre y cuando no mantengamos las piernas cruzadas durante largos períodos de tiempo.
• Evitemos, si es posible, pasar demasiado tiempo de pie en la misma posición sin movernos. La fuerza de la gravedad dificulta el retorno venoso al corazón, y esto no es bueno para nuestra circulación.
• Otra cosa que nos encanta: la ropa ajustada y los tacones altos. Olvidémonos de ellos, al menos hasta el sábado por la noche cuando todo está permitido, porque empeoran nuestra circulación y, siendo sinceras, ni siquiera son cómodos. ¡Así que, con la ayuda de la moda de los últimos años, adelante con zapatillas deportivas y pantalones holgados! 

¡Para ganar la batalla, necesitamos aliados!

La batalla contra la piel de naranja puede ser difícil, ¡pero con los aliados adecuados podemos lograrlo!

Nuestro primer aliado fundamental como tratamiento natural para la celulitis será nuestra crema anticelulítica con pimienta rosa y cafeína natural, que nos ayudará a mejorar la elasticidad y firmeza de nuestra piel, haciéndola más compacta y suave, y reduciendo los antiestéticos hoyuelos.

Además, gracias a los activos que contiene, también tendrá un efecto tonificante en los capilares más externos.

Démonos un masaje

No podemos seguir esperando llegar a casa por la noche y encontrar un masajista personal listo para hacernos olvidar el estrés del día, desafortunadamente, es una esperanza vana.

Aquí es donde entra en juego la sabiduría popular: quien se hace a sí mismo, hace para tres.

Así que arremanguémonos y démonos un buen capricho masajeando nuestras piernas cansadas con un aceite anticelulítico rico en extractos de gingko, hiedra y rusco, y aceites esenciales como limón y menta, para una acción estimulante, tonificante y reafirmante. Este serà un perfecto tratamiento natural para la celulitis

Realicemos el masaje con movimientos circulares de abajo hacia arriba, insistiendo en los tobillos, la parte posterior de las rodillas y la parte interna del muslo.

Después de las primeras veces, este pequeño ritual nos hará sentir tan bien que no podremos prescindir de él.

Exfoliémonos

Otro tratamiento natural perfecto para la celulitis es realizar un exfoliante: una vez a la semana, comencemos la ducha con un exfoliante, será fundamental para eliminar las células muertas, estimular la microcirculación y suavizar la piel. Además, nos ayudará a restaurar su equilibrio y brillo (¡y evitar pelos encarnados!).

Elijamos productos con acción abrasiva mecánica, que contengan polvos, semillas molidas, sal y azúcar o celulosa, cáscara de almendra micronizada y sal marina, enriquecidos con extractos vegetales como extracto de hiedra, ginkgo, romero y aceites esenciales de hierba limón y menta, especialmente adecuados para reactivar la microcirculación y lograr un efecto suavizante, tonificante y anticelulítico completo.

¡La lucha contra la celulitis no es solo en primavera!

Cuando comenzamos a ver el sol primaveral y la temperatura se vuelve cálida, nos invade la ansiedad por lucir bien en traje de baño, así que comenzamos a aplicarnos crema por todas partes. Luego, cuando los días vuelven a acortarse y llega el primer frío, guardamos todo en el cajón y no pensamos en ello hasta el próximo año.

Sin embargo, olvidamos que la celulitis no entra en letargo como las marmotas, sino que sigue trabajando incansablemente debajo de nuestra piel y, de hecho, el estilo de vida más sedentario en invierno, las prendas de vestir más pesadas y envolventes, y los cambios de temperatura entre el exterior y los ambientes interiores, empeoran la situación.

Por eso, nunca deberíamos suspender los tratamientos en invierno, sino continuarlos durante todo el año, por supuesto, como tratamientos de mantenimiento, con una frecuencia de aplicación menor que en la fase inicial recomendada en las temporadas de primavera y verano.

Otra cosa que quizás no sepamos es que la celulitis tiende a volverse crónica, por lo que es importante no dejar de combatirla con todas las armas a nuestra disposición.

¡Riamos más y preocupémonos menos!

El estrés nos hace daño, eso es un hecho. Desafortunadamente, no podemos eliminarlo por completo, ya que hay infinitas variables y situaciones de la vida cotidiana que lo causan.

Sin embargo, un enfoque positivo puede ayudarnos a enfrentarlo y no dejarnos abrumar: riámonos con frecuencia, dejemos que las cosas que no nos gustan resbalen, encontremos la serenidad para aceptar las cosas que no podemos cambiar y el coraje para cambiar las cosas que sí podemos.

Digamos adiós a ciertos vicios

El tabaco y el alcohol son dos vicios que nos brindan una sensación de bienestar falsa y vacía. Nos hacen sentir bien en el momento, pero a largo plazo intoxican nuestro cuerpo y nuestra mente.

El tabaco empeora la circulación y favorece el desarrollo de los radicales libres responsables del envejecimiento celular, verdaderos enemigos de la belleza de nuestra piel y nuestro cuerpo, por lo tanto, está totalmente prohibido si queremos combatir la celulitis.

Reduzcamos el consumo de alcohol y, sobre todo, de bebidas alcohólicas fuertes: una copa de vino al día es beneficiosa para nuestro cuerpo y nuestro estado de ánimo, pero si exageramos, obtendremos el efecto completamente opuesto.

¡Seamos positivas!

El enfoque mental es fundamental, siempre y en todas las situaciones que enfrentamos, ¡incluyendo la celulitis!

Convirtamos nuestras palabras mágicas favoritas en serenidad, constancia, motivación e ironía... ¡cada batalla parecerá difícil y los resultados que obtendremos serán más satisfactorios! ¡Este será el tratamiento natural más efectivo para la celulitis de todos!

Y recordemos siempre que cada una de nosotras es única y maravillosa.